El mal llamado entrenador de pueblo

La provincia sevillana está avanzando a buen ritmo tanto estructuralmente como deportivamente. Con los pueblos tengo un ojo clínico para saber si se están haciendo las cosas relativamente bien o mal. Sólo tengo que saber si la contratación de entrenadores depende del Ayuntamiento en cuestión o de un club con cierta independencia. Si el club está creado desde el Ayuntamiento y es este quién lo maneja al antojo de los políticos, tampoco sirve como club independiente con propias decisiones.

No generalizo, sólo es un alto porcentaje, pero si os fijáis, normalmente en los pueblos que no tienen una estructura de club de baloncesto creada, los "entrenadores de baloncesto" no tienen mucha idea de este deporte. Son los llamados ‘monitores deportivos’ que a determinada hora dan baloncesto, después dan fútbol sala para terminar dando atletismo. Son los técnicos deportivos de confianza de los Ayuntamientos, que les pueden salvar la papeleta en diversas áreas sin tener una cualificación adecuada.


Estos ‘mal llamados entrenadores’, no están ahí por amor a este deporte ni por querer sacar un grupo adelante (recuerden que no quiero generalizar pero mi experiencia me lleva a inducir que en la mayoría de los casos es así). Su objetivo es entrar en un Ayuntamiento a través de unas bases de oposición que con un magisterio o con un “título” de monitor deportivo y con experiencia (da igual de que sea) para conseguir ese dinerillo extra y tener oportunidad de seguir vinculado al ente público para futuros proyectos.

En mi etapa como jugador de baloncesto tuve a un entrenador de atletismo en el que los entrenamientos todos eran de velocidad para ver quien llegaba antes botando a la canasta contraria sin importar los gestos ni simplemente que la pelota entrase. Después tuve un entrenador de fútbol sala que recuerdo que solamente realizábamos jugadas para determinadas personas como si de Messi se tratase. Como podréis deducir, de estas generaciones ninguno sigue realizando la práctica deportiva del baloncesto en la actualidad. Muchos sábados no íbamos a competir porque simplemente los entrenadores no se presentaban debido a que no le entraba en la nómina los fines de semana.

Por suerte, ahora la cosa está cambiando en la provincia sevillana. Muchos pueblos poseen una estructura de club que cada vez se van distanciando más del manejo de los Ayuntamientos, dejando hacer la tarea baloncestística a los que realmente saben de este deporte. No quiero decir con esto que los Ayuntamientos no respalden a los clubes si no que no se meten en su tarea. Los entrenadores tienen ya de inicio la clara convicción de que con esto no se gana dinero (¿Cuanto se tarda en amortizar los 600-700€ que cuesta el nivel 1 de entrenador de baloncesto?), sólo quieren seguir vinculados a este deporte de la manera que sea. Los monitores deportivos ya no pueden acceder a determinados puestos porque ahora sí su cualificación no es la idónea para desarrollar ese puesto.

En definitiva, necesitamos a gente que quiera implicarse con el baloncesto. Gente que no venga a ensuciar nuestro deporte con malas sañas para conseguir dos duros. Ayuntamientos que dejen de colocar a amigotes. Necesitamos entrenadores de baloncesto.